martes, 13 de octubre de 2015

Enésima lección

Llevo exactamente 10 años, 15 meses y 8 días y medio intentando entenderme a mi mismo, calculo más o menos ese tiempo, pues el resto, he estado durmiendo. Durante todos esos días, además he tenido que intentar entender a decenas de buenos y malos profesores, buenos profesores a los que he querido entender, y otros a los que no he prestado la menor atención, en algunos casos, incluso llegué a comprender algo o la mitad de lo que me estaban contando.

Al acabar cada una de estas lecciones, lo único que he llegado a entender, es que nadie puede pretender que a día de hoy, ni tan siquiera yo me entienda a mi mismo, es demasiado difícil definir algo en un cambio tan constante, algo que ni siquiera sabe definirse así mismo sin dejar las frases incompletas, y que además, de vez en cuando ha prestado atención a algún tipo de profesor. Por eso cuando alguien se empeña en que yo sepa lo que quiero, lo único que puedo hacer es convertir mi mar de dudas en un océano y dejar de prestar atención, incluso cuando ese alguien lo hace sin pretenderlo, sin querer captar mi atención, o siendo un mal profesor. Al final nada cambia mucho, nunca sabré dónde estoy, ni quiero saberlo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario